Abel Caballero, alcalde de Vigo: “Queremos seguir siendo el motor económico de Galicia”
La fuerza económica y social de Vigo es imparable. El corazón industrial de Galicia está recobrando el ritmo de crecimiento con latidos firmes e intensos que impulsan incluso al resto del territorio. Vigo avanza en una Galicia del siglo XXI que no quiere ni debe quedarse atrás y donde la urbe es un eje vertebral.
Nuestra ciudad está saliendo fortalecida de una crisis que ha tenido un impacto dramático pero que hemos entendido como la mejor oportunidad de reforzar un sistema económico que se ha mostrado eficaz y que nos ha consolidado como motor de crecimiento de Galicia. Hemos aprendido para mejorar y lo hemos hecho sin dejar atrás a aquellos a quienes la fortuna no ha acompañado.
En este contexto, Vigo tiene que seguir potenciando las características que la han situado a la cabeza de Galicia en índices de ocupación, de actividad económica y empresarial y en productividad. Además, se ha afianzado como una de las urbes exportadoras más importantes de España y está demostrando su capacidad competitiva global en sectores como la pesca, la automoción, el granito o el naval. Podemos afirmar con rotundidad que Vigo es el éxito de un sistema productivo construido sobre los pilares del trabajo y la solidaridad, la adaptación y anticipación a las nuevas circunstancias y el carácter dinámico y emprendedor de nuestro tejido socioeconómico.
Asimismo, existe otro aspecto fundamental que explica el desarrollo positivo de Vigo en la crisis internacional: nuestro sistema económico está enraizado en sectores de carácter productivo, generadores de bienes estratégicos y no coyunturales, que contribuyen a la solidez y propician la falta de especulación propia de otras economías sostenidas en sectores menos estables.
Desde hace varios años, la ciudad ha trazado con precisión la trayectoria que quiere seguir y ha marcado unos objetivos claros. Queremos continuar liderando la producción de vehículos de España, queremos seguir siendo el primer puerto del mundo en descarga de pesca para el consumo humano y queremos que las grúas vuelvan a construir con la tecnología más puntera y con toda la carga de trabajo que son capaces de asumir, como han demostrado. Pero no somos conformistas; queremos ir más allá. Ahora que Vigo se ha consolidado como la ciudad industrial más importante del noroeste español y que se han asentado las bases para la incipiente recuperación económica, estamos preparados para asumir retos desde lo colectivo, sobre la base de la constancia, la exigencia y la unión.
En base a nuestra experiencia empresarial, entidades públicas y privadas hemos cooperado para coordinar acciones que contribuyan a un desenlace en positivo de la crisis en Vigo y en la ciudadanía viguesa, como ya está ocurriendo. En el gobierno local tomamos la determinación de asumir una actitud proactiva en defensa del empleo, un área a la que dedicamos 5,3 millones de euros de nuestro presupuesto, y he mos creado 3.500 puestos de trabajo directos e indirectos en el año 2014.
Desde el gobierno local hemos visitado las principales factorías de la ciudad para pulsar el estado de la industria y su capacidad para generar empleo. De la misma manera, colaboramos con empresarios y sindicatos, adoptando medidas consensuadas con los principales implicados. En defensa del trabajo y la actividad mercantil, hemos activado una serie de mesas de diálogo, que presido yo mismo, como alcalde y máximo representante político de la ciudad, en las que se abordan posibles acciones para los sectores estratégicos vigueses.
La automoción emplea a casi 20.000 personas, supone el 12% del empleo industrial de Galicia y el 14% del PIB de la comunidad, razones por las cuales es un sector absolutamente prioritario para esta ciudad y con el que estamos en comunicación de forma continuada. Desde el Concello, hemos trabajado al lado del textil, que emplea a más de un millar de vigueses; con el granito, que tiene más de 20 compañías ubicadas en el área metropolitana de Vigo y también hemos establecido un contacto permanente con la construcción y el Colegio Oficial de Arquitectos de Galicia para desarrollar ámbitos urbanísticos en Vigo así como con el sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación, que genera un enorme volumen de negocio y trabajo en la ciudad, tanto directo como indirecto.
Permanecemos alerta a la evolución de la economía, en contacto permanente con agentes implicados en los principales motores de la industria, la tecnología, la formación, el conocimiento, la investigación y el emprendimiento. Creemos en el diálogo y la experiencia de nuestra ciudad en sobreponerse a la adversidad nos hace ser optimistas ante el futuro y el papel destacado que Vigo tiene en él.
Al tiempo que dedicamos todos los esfuerzos al ámbito económico, nuestros gobiernos se han caracterizado por la atención a las personas, que son siempre lo primero y más importante. Por eso, en la comprensión de que nuestro deber y responsabilidad es estar cerca de los ciudadanos, porque gobernamos por y para la población viguesa, dedicamos 12 millones de euros cada año a las políticas sociales. Sabemos que la sociedad engloba nuestras causas personales, que el esfuerzo de cada uno cobra sentido cuando hay una meta común y la nuestra es hacer ciudad.
